Comentarios del Ing. Jorge Pérez Patiño
Transcurridas las primeras 24 horas de la Regata Buenos Aires – Río de Janeiro, los barcos más veloces han capitalizado tremendamente las condiciones de vientos favorables y han entrado al Océano entre las 11 y las 12, detrás del Fortuna III que lo hizo pocos minutos después de las 10. En total ocho de los 21 barcos viraron Punta del Este antes de cumplirse 24 horas de competencia.
Para ellos comienza el momento de tomar decisiones estratégicas y tácticas.
¿Cerca o lejos de la costa?
El rumbo directo a Río de Janeiro implica una derrota muy cercana a la costa. Con los pronósticos disponibles en este momento esa decisión es defendible, avanzar directo mientras se pueda, antes de que el viento rote a proa. Pero también es cierto que más cerca de la costa aumentan los riesgos de varaduras, corrientes adversas, tráfico pesquero, artes de pesca rudimentarias no señalizadas, cantos de sirenas, etc.
Por otro lado, la derrota mar adentro, la recomendada por muchos, si bien implica navegar algunas millas extra, es un buen resguardo para posicionarse a futuro ganando barlovento y llegar mejor posicionados a la zona de calmas típica de las inmediaciones de la Bahía de Guanabara.
Ya se empieza a vislumbrar cuál opción va a seguir cada uno.
Para saber si fue acertada o no habrá que esperar al menos 24 horas y actualizar los pronósticos, que siempre siguen la regla infalible de que Puede Fallar.